Deporte embarazo y postparto

Creo que en general no hay mucha Información respecto al ejercicio más óptimo en estas etapas tan importantes que son el embarazo y el postparto, o al menos esa fue y sigue siendo mi experiencia al ver y escuchar la Información a mis alrededores.

Está la teoría que sostiene que si te embarazas te dicen casi casi que no hagas nada, lo cual estoy de acuerdo si se tiene alguna condición especial y/o de riesgo. De lo contrario, moverte de la manera adecuada te ayuda a las molestias del embarazo, prepararte para el parto y a una más rápida y mejor recuperación.

Por otro lado, está la teoría de sigue tu vida igual como lo hacías antes de embarazarte, que fue mi caso desde mi primer día embarazo antes de tener la información que tengo ahorita. Y pues, yo dedicada al fitness seguí con mis clases todo el embarazo, brincando, burpees, arriba, abajo, jaja, como si nada. Y la verdad es que en su momento me sentía bien y fue un buen embarazo, pero en el parto fue donde sentí que algo podría haber hecho mejor. Pues, a pesar que también soy una loca que ama el parto, fue un parto de 24h donde duré pujando horas y sentía que nomás no salía. Fue un bebé grande de 3.850 kg y 50cm, pero yo soy de la teoría que el cuerpo es muy sabio y hacemos bebés que podemos parir. Obviamente me desgarré, nada grave, pero sí fueron días incómodos de recuperación. No obstante, el día 41 regresé a ejercitarme... Empecé poco a poco, pero literal volví a lo mismo que hacía antes. Si eres mamá me vas a entender, bienvenida incontinencia por 8 meses y pensé que era parte “normal” después de parir. A lo que te recomiendan siempre los famosos ejercicios de Kegel.

Pero gracias a esa experiencia, la poca información, y mis ganas locas siempre de conocer y entender más el cuerpo humano, tomé varios cursos acerca del embarazo y postparto y cómo cambia y funciona el cuerpo internamente en estas etapas. Ahí fue donde entendí que por supuesto que puedes hacer todo embarazada, pues efectivamente no estamos enfermas, pero la realidad es que el cuerpo está cambiando, la presión que se ejerce es mucha y hay mejores maneras de tratarlo, que tienen múltiples beneficios. Es una etapa de conectar y estar sanas, pero no empujar el cuerpo al límite. Y esto ayuda a evitar y/o contrarrestar los dolores de espalda baja, la incontinencia, evitar o aminorar la secuela de la diástasis abdominal y tener el piso pélvico fuerte pero a la vez elástico para el parto.

Y en el postparto, el hacer los ejercicios adecuados empezando por una buena conexión de respiración de piso pélvico, abdominales transversos y diafragma, hace que se regenere el cuerpo, desaparezca esa “pancita” y sane el piso pélvico. Pues el cuerpo funciona como un sistema y el solo hacer ejercicios de Kegel es algo aislado que puede ser contraproducente, se necesita integrar otros ejercicios para tener efectos óptimos.

Es por eso que dentro de la plataforma andrealaveaga.com no solo manejo workouts efectivos, cortos y enfocados. Dedico una sección para ejercicios específicos para el embarazo y postparto, donde personalizo las rutinas para ayudarte a tener una mejor experiencia en estas etapas tan únicas. Además de que incluyo un recetario vegano, para tener ideas nuevas y saludables para alimentarte en el día a día.

Por: Andrea Laveaga

Etiquetas: Edición 95